Científicos británicos están cerca de hallar una cura no invasiva a las cataratas, se trata según el estudio publicado por la revista Nature de unas gotas que aplicadas detienen el avance y curan este mal que aqueja a tantos en todo el mundo.
Lo positivo resalta poniendo final a las cirugías, siendo gotas se convierten en una cura no invasiva además de estar más al alcance de todos hablando económicamente. Los investigadores opinan: «Tan sólo sería necesario aplicar unas cuantas gotas en los ojos y se terminarían los problemas de visión del paciente».
Cabe señalar que las gotas aún están siendo probadas en perros, pero los resultados prometen la cura si las gotas se aplican en una etapa temprana de las cataratas.
El medicamento tiene un componente llamado lanosterol, el cual los investigadores puede tener la particularidad de aumentar la transparencia del cristalino. Dicho potencial del lanosterol se descubrió mientras se investigaba a dos familias con cataratas congénitas, ellos presentaban un gen implicado en fabricar lanosterol, se trata de una mutación.
En base al descubrimiento la investigación comenzó aplicando gotas de lanosterol a grupos de perros que habían desarrollado cataratas de manera natural, pasado mes y medio la opacidad bajo considerablemente e incluso el dolor. El estudio concluye que el lanosterol reduce las cataratas, un primer paso hacia la cura. Deseamos que la investigación llegue a buen puerto, mucha gente sufre de cataratas y si la cura se encuentra en gotas, bienvenida sea.